miércoles, 30 de noviembre de 2011

La modernidad, y la posición del hombre en el mundo.

La modernidad tiene una característica fundamental de todos conocida. Es la vuelta al sujeto, la vuelta al yo, la conversión del hombre como centro de la realidad y, por tanto, una reivindicación extraordinaria del ser humano, que intentan los modernos no reducir a categorías cósmicas y presentar como centro del universo. Esto se observa, por ejemplo, en toda la filosofía renacentista. Y después esta reivindicación del ser humano será radicalizada en la modernidad en sentido estricto del Romanticismo alemán y, antes, de la Ilustración. Esto de la reivindicación del sujeto, del ser humano, y de su centralidad dentro del universo, realmente es algo extraordinario y maravilloso y además es un motivo y una realidad estrictamente cristianos. Una de las características del pensamiento griego, como sabéis, fue el haber despreciado al hombre y haberlo reducido a categorías cósmicas. Sin embargo por el cristianismo, como todos sabemos, entra en Europa el concepto de persona; por tanto no es que la modernidad invente nada al respecto. Y por tanto, dentro de estos límites, es una idea fecunda, la de la reivindicación del ser humano y de su centralidad.

http://www.mercaba.org/DOSSIERES/modernidad.htm

CRISTIANISMO Y MODERNIDAD Manuel Ureña Pastor, Obispo de Cartagena

No hay comentarios:

Publicar un comentario